Ayer
hacia el mediodía, la mayoría del personal del centro mayor de 45 años
recibimos la primera dosis de la vacuna de Oxford contra la Covid-19. Esto incluye profesorado (español y
marroquí), y personal de administración y servicios.
La
vacunación tuvo lugar en la Academia Regional de Educación. En algún caso ha habido problemas
administrativos, pero esperamos que se solucionen en breve.
Estamos muy contentos, puesto que la vacuna supone el medio más eficaz para luchar contra la situación sanitaria que está sufriendo el mundo entero, desde hace un año. Si estamos inmunizados, cortaremos la cadena de transmisión de la enfermedad, y evitaremos que llegue a las personas vulnerables.
La
vacunación de ayer por la mañana ha sido sólo el primer paso. Dentro de unas semanas recibiremos la segunda
dosis. Y poco después, adquiriremos la
inmunidad.
No
va a suponer ningún cambio en las medidas de precaución en el Colegio. Una parte de los trabajadores del centro, la
totalidad del alumnado y la mayoría de las familias siguen sin vacunar. No vamos a relajar estas medidas que llevamos
implantando desde principio de curso, y que están dando tan buenos resultados. La enfermedad sigue ahí y hay que seguir
alerta.
Pero
nos hace ver el futuro con más optimismo.
En cuanto se extienda la vacuna a la mayoría de la población, el peligro
disminuirá, y podremos ir recuperando progresivamente la normalidad en nuestras
actividades habituales.
Desde
aquí, queremos agradecer la amabilidad de todo el personal sanitario y
administrativo en la intervención de ayer. Y a las autoridades locales, por incluirnos
en el plan de vacunación en esta fase tan temprana.
El
hecho de priorizar la administración de la vacuna a todos los docentes y
personal de los centros escolares es muy significativo. Supone el reconocimiento del valor social de
la educación. Y deja ver hasta qué punto
se está apostando por el mantenimiento de los centros abiertos, pese al
contexto general de emergencia sanitaria.
Esta vacunación tiene que aplanar el camino para el mantenimiento de
las clases presenciales en las próximas semanas y meses. Confiemos que podamos seguir disfrutando de
esta relativa normalidad lectiva. Y,
poco a poco, podamos ir recuperando otros espacios en la actividad del centro,
que tanto nos aportan.
No nos cabe duda de que, a la postre, los máximos beneficiados de esta continuidad van a ser nuestros alumnos y alumnas. Al fin y al cabo, son los verdaderos protagonistas, y lo que da sentido a todo esto.
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