El soleado día uno de diciembre las alumnas Soukaina,
Fátima, Aya, Inés y los alumnos Mounir, Moustapha y Ali , junto con el profesor Alberto y José
Juan y las profesoras Conchita e Iracema,
del Colegio Jovellanos,
emprendimos camino al poblado de Tafnessa. El motivo de la visita era
realizar la actividad de campo de repoblación con la especie autoctóna lentisco (Pistacia lentiscus), que dirigía
El Andalossi Mohamed miembros de la asociación ecologista “Azid
pour l’environnment” en colaboración con Ziani Amal.
No obstante, antes de
proceder a la repoblación, Mohamed Andalossi nos llevó a la tumba de un
“Morabito”, persona venerada en la zona
o considerada santa (en árabe, مُرابِط [murābiṭ], también llamado مربوط [marbūṭ]).
Podría considerarse en realidad un cementerio, puesto que además del Morabito,
estaban enterradas otras personas cerca
del Santo. Nos explicó que en este
recinto la vegetación es la originaria de la zona, sin alteraciones del hombre,
por respeto al lugar sagrado. Ésto nos sirvió para observar un sotobosque
frondoso con musgos, líquenes. Además de plantas aromáticas, entre ellas, lavanda, tomillo, marrubium y muchas más, las
cuales vimos a los pies de arbustos y árboles como la thuya, algarrabo,
lentisco, palmito y chumberas.
Al entrar en la tumba del
Morabito, pudimos observar que en sus paredes había ofrendas de flora
silvestre. Nos fijamos en otra arcaica
construcción, al lado de la tumba, que
estaba hecha de madera de tuya y otros elementos naturales y con una técnica
que le ha permitido perdurar en el tiempo y resistir terremotos.
Dejamos el lugar sagrado no sin antes observar el resto de tumbas donde crecían lirios. En todo momento tuvimos mucho cuidado y no tomamos muestras de vegetación ni animales, por respeto al santo y resto de difuntos.
Enfilamos camino hacia el
vivero donde nos esperaba Amal y las
mujeres de la asociación para darnos los plantones de repoblación. Entretanto,
por el camino, pudimos contemplar la
campiña con las montañas al fondo, donde la claridad del día nos permitió
observar el pico más alto del Rif y el valle erosionado por riachuelos. Una
pareja de ratoneros planeba en el cielo, más tarde veríamos cuervos y un
conjunto de chovas piqirrojas. Alberto nos fue mostrando en la excursión,
distintos insectos, una salamanquesa, un
opilión y un pequeño escorpión.
Recogimos las plantas de lentisco y con azadas y pala llevamos a cabo la repoblación de plantitas que tardarán mucho tiempo en crecer. Mohamed nos explicó que el lentisco es una planta que tiene muchas utilidades, entre ellas las medicinales, y que repoblar sirve para frenar la erosión y preservar el suelo, que es fuente de riqueza. A lo que hay que añadir que las plantas son sumideros de CO2 , lo que ayuda a contrarrestar el efecto invernadero.
Es tradición pedir un deseo en secreto por
árbol plantado, y así lo hicimos algunos.
Nos tomamos nuestro merecido
bocadillo y emprendimos regreso a casa.
Sin duda fue una mañana de
aprendizaje y disfrute para todos. Mereció la pena!
Nuestro agradecimiento
a El Andalossi Mohamed y Ziani Amal
miembros de la asociación ecologista “Azid pour l’environnment”, y mujeres de la asociación.
Destacar el buen trabajo de
nuestra fotógrafa “profesional” Conchita.
Reconocimiento a la buena actitud de los alumnos participantes
en la excursión.
Fotos: Concepción Vergara
Espín.Texto: Iracema Martín.
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